La lectura del libro de Daniel Goleman, Emotional Intelligence, publicado en 1995, me resultó del todo enriquecedora y me hizo reflexionar sobre sobre mí y sobre el funcionamiento de nuestra compleja sociedad a todos los niveles , como digo a nivel personal , en las relaciones laborales y sobre todo en el ámbito educativo.
¿Qué quiero yo para mis hijos ? ¿Cómo quiero que les eduquen? ¿Me parece fundamental que sepan controlar sus emociones ? ¿Es necesaria su inclusión en las aulas ?
Tanto me fascinó el tema y me parecía tan "marciano" que en el siglo XXI no fuese normal la aplicación de tantas técnicas como existen para educar a nuestros hijos en las emociones, que decidí desarrollar mi trabajo fin de grado de magisterio en primaria sobre este tema.
Daniel Goleman, en su libro estima que la inteligencia emocional se puede organizar en torno a cinco capacidades: conocer las emociones y sentimientos propios, manejarlos, reconocerlos, crear la propia motivación, y gestionar las relaciones. Las cinco capacidades son :
- Autoconocimiento Emocional, o conciencia de uno mismo.
- Autocontrol Emocional o autorregulación emocional.
- Automotivación.
- Reconocimiento de emociones ajenas o empatía.
- Relaciones interpersonales . Habilidades sociales.
Solo al ver enumerados estas cinco capacidades es de sentido común que en las aulas hay que desarrollar técnicas , para el trabajo de cada una de ellas.
Comenzando por el autoconocimiento, me encanta el episodio del libro del escritor italiano Valerio Manfredi en su novela “Alexandros. El Hijo del Sueño” ,cuenta que, Alejandro Magno, de regreso de una de sus campañas, visita la ciudad Delfos y, fascinado, se detuvo ante el santuario de Apolo y contempló las palabras esculpidas en letras de oro que pronunció Sócrates que decían: “Conócete a ti mismo”. Crátero, que lo acompañaba, le preguntó:
“¿Qué significa esto, en tu opinión?”, Alejandro respondió: “Es evidente. Conocerse a uno mismo es la tarea más difícil porque pone en juego directamente nuestra racionalidad, pero también nuestros miedos y pasiones. Si uno consigue conocerse a fondo a sí mismo, sabrá comprender a los demás y la realidad que lo rodea”.
Hecho este inciso tan ilustrativo , decir que estudios recientes dejan ver que una falta en IE puede afectar, y de hecho afecta, a los estudiantes tanto dentro como fuera del contexto escolar (Chan & Bajgar, 2001; Extremera y Fernández Berrocal, 2003).
Por tanto, ¿es posible enseñar IE? La conclusión es que no sólo es posible, sino que además es necesario para el buen desarrollo personal y académico de los estudiantes, incluir programas de IE en las escuelas. El objetivo último debe ser educar a los alumnos a que conozcan, comuniquen, manejen y regulen sus emociones. Los beneficios de promover la IE como parte de los programas educativos en resumen serían:
1. Alumnos que son conscientes de sus propias emociones, y llegan a ser capaces de regularlas: el alumno es consciente del nivel de estrés que produce una determinada actividad o reto, y está psicológicamente preparado para enfrentarse a ella minimizando el impacto del estrés.
2. Maestros que no generan experiencias negativas en los alumnos,y alumnos, por otro lado, capaces de recuperarse de estas experiencias negativas cuando eventualmente se produzcan, fuera o dentro de la escuela.
3. Alumnos que mejoran su rendimiento académico, al incrementar su capacidad cognitiva por medio de la eliminación de emociones que se interpongan en el proceso educacional.
4. Alumnos sin problemas de conducta, que no necesitan agentes externos para paliar un déficit emocional, que además comunican sus emociones y las manejan antes de que éstas les dominen.
Seguiré con este tema que me encanta , y termino diciendo que si , que hay que educar las emociones y hacerlo desde el colegio, sin duda es fundamental.
Hecho este inciso tan ilustrativo , decir que estudios recientes dejan ver que una falta en IE puede afectar, y de hecho afecta, a los estudiantes tanto dentro como fuera del contexto escolar (Chan & Bajgar, 2001; Extremera y Fernández Berrocal, 2003).
Por tanto, ¿es posible enseñar IE? La conclusión es que no sólo es posible, sino que además es necesario para el buen desarrollo personal y académico de los estudiantes, incluir programas de IE en las escuelas. El objetivo último debe ser educar a los alumnos a que conozcan, comuniquen, manejen y regulen sus emociones. Los beneficios de promover la IE como parte de los programas educativos en resumen serían:
1. Alumnos que son conscientes de sus propias emociones, y llegan a ser capaces de regularlas: el alumno es consciente del nivel de estrés que produce una determinada actividad o reto, y está psicológicamente preparado para enfrentarse a ella minimizando el impacto del estrés.
2. Maestros que no generan experiencias negativas en los alumnos,y alumnos, por otro lado, capaces de recuperarse de estas experiencias negativas cuando eventualmente se produzcan, fuera o dentro de la escuela.
3. Alumnos que mejoran su rendimiento académico, al incrementar su capacidad cognitiva por medio de la eliminación de emociones que se interpongan en el proceso educacional.
4. Alumnos sin problemas de conducta, que no necesitan agentes externos para paliar un déficit emocional, que además comunican sus emociones y las manejan antes de que éstas les dominen.
Seguiré con este tema que me encanta , y termino diciendo que si , que hay que educar las emociones y hacerlo desde el colegio, sin duda es fundamental.
He asistido a varias jornadas sobre Inteligencia Emocional en la Escuela de Padres del cole de mi hijo y siempre me ha parecido un tema muy interesante. El libro no lo conocía así que será mi próxima lectura.
ResponderEliminarTe va a encantar Carmen.
ResponderEliminarMe parece fundamental incluirlo al programa de los colegios. Gracias Dulce por hacer un resumen tan enriquecedor y tu recomendación del libro.
ResponderEliminarGracias a ti.
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